Cap 40

Me gusto escribir esto, se que William es re malo JAJAJAJA XD pero es mi personaje favorito aunque no lo crean :|

Besos disfruten :D Enjoy, Have funn! >.<

PD:- 5 capitulos para el fin de la primera temporada :D

--------------------------

Pasaron unos días después de la sorpresiva carta de William, Sofía no sabia que hacer, si creer en el o simplemente tomarlo como una broma, decidió tomar carta en el asunto y fue a la casa de los Mcgilligan ella sola, a escondida de toda su familia y de Nicole, quien dormía una placida siesta en su habitación, ella no sospecho nada de la salida de su prima ya que las dos se habían acostado, apenas Sofía noto que su prima se durmió, se cambio de ropa, se arreglo y perfumo, cuando estaba apunto de salir sus sentidos vampíricos le alertaron de que alguien se aproximaba, rápidamente y sin hacer ni un solo ruido se alejo de la puerta, se quedo para mirando la puerta cerrada, unos pasos comenzaron a escucharse a lo lejos, lentamente se acercaban por el pasillo, Sofía miraba nerviosa la parte de debajo de la puerta que dejaba entrar un poco de luz, vio como los pasos pasaban por enfrente de su puerta sin detenerse, la chica respiro aliviada decidió buscar otra forma de escaparse miro a su alrededor pero nada se le venia a la cabeza, fue cuando vio la ventana que estaba entre abierta, fue hasta ella y la abrió un poco mas, en eso momento la ventana hizo un poco de ruido, se dio vuelta y vio que Nicole se dio vuelta, suspiro al ver que no despertó, termino de abrir la ventana completamente, se sujeto en uno de los bordes de la ventaba y apoyo uno de sus pies, miro hacia abajo y se sintió un poco mareada debido a la altura, pero cerro los ojos y tomo aire, tras un entrecortado suspiro coloco su otra mano en el otro lado de la ventaba y subió su otro pie, luego se paro y usando sus habilidades salto al suelo, cayo bien, con una mano apoyada en el suelo al igual que la su rodilla derecha, haciendo equilibrio con su mano izquierda y su pierna, se puso de pie y miro hacia la ventana, luego miro a su alrededor y puedo ver que no había nadie merodeando por hay, fue en busca de su caballo llamado Eloy, era un macho color completamente negro, Sofía lo tenia desde hacia cuatro años, amaba mucho a su caballo, lo habían encontrado un día vagando por el bosque, el pobre estaba siendo maltratado por unos hombre, Sofía uso sus habilidades las cuales estaba aprendiendo a usar, se escondió detrás de un árbol, se concentro en los látigos de los hombres, los miro fijamente casi sin parpadear, creía que podía quitárselos con su mente, una vez había podido mover un vaso de agua sin darse cuenta, pero no resultaba, dejo de mirarlos y trato de pensar en otra cosa para intentar salvar al pobre caballo fue así que decidió usar la habilidad que compartía con todos sus hermanos y primos la de poder correr tan rápido o como muchos pensaba aparecer de la nada para poder llegar del maltratado carruaje en el cual viajaban los dos hombres, tomo valor y fue corriendo al carruaje, los hombre pudieron escuchar unos pasos, lo que hizo que se detuvieran, comenzaron a acercarse al carruaje Sofía podía escuchar los pasos, uno de los hombres se acercaba por la derecha y otro por la izquierda, miro hacia arriba y dio un salto sin producir sonido alguno, la chica se asomo y pudo ver a los hombres como se acercaban a el lugar donde estaba ella, se sintieron desconcertados; “Debió de ser algún animal…” Dijo uno de los hombre, la chica respiro aliviada ahora solo le faltaba ahuyentar a los hombres para poder llevarse al caballo que tenia unos cortes en su lomo y en su cara; “Tengo hambre… vallamos a el pueblo a comer algo…” Dijo uno de los hombres caminando al carruaje, “Que hacemos con el caballo… No parece estar débil…” Dijo el otro hombre; “Vamos… atémoslo otra vez así nos largamos…” Dijo finalmente el otro hombre, Sofía se agacho para que los hombres no pudieran ver que ella estaba enzima de el carruaje “Debo hacer algo para salvarlo…” se dijo en voz baja Sofía, comenzó a mirar a su alrededor otra vez, buscando algo, fue cuando vio que el carruaje tenia un agujero grande, pudo ver en el manzanas y otras cosas fáciles de sacar, fue así que se le ocurrió una idea, metió su brazo y saco unas cuantas manzanas y una olla color plata, se puso de pie tras poder agarrar todo lo que necesitaba; se modio el labio inferior y con ayuda de sus piernas pudo saltar a un árbol el cual la cubriría bastante con sus ramas, se escondió bien entre las ramas, tomo una de las manzanas, humedeció sus labio con su lengua y lanzo la primera manzana con toda su fuerza, al no tener una buena puntería la manzana callo cerca los hombre pero sirvió para que estos comenzaron a asustarse, los dos hombres se quedaron mirando la manzana, luego se miraron entre si, Sofía rio, lanzo otra manzana, esta vez logro pegarle en la cabeza, el hombre que recibió el golpe miro para todos lados y luego miro al árbol, Sofía al ver que pudo verla cambio a otro árbol que también la taparía, el hombre se asusto al ver una sombre negra que salía del árbol, Sofía se posiciono, esta vez quedo enfrente de los hombres que miraba para todos lados, Sofía lanzo las ultimas dos manzanas que le quedaba y logro pegarle a los hombres, a uno en el estomago y al otro en la cabeza, los dos hombres comenzaron a maldecir y mirar para todos lados.

-Quien es ahí?- Dijo uno.

-No se si sabias pero dice que este bosque esta encantado…- Dijo uno de los hombres muy asustado.

-Tonterías!- Dijo el otro hombre mirando a el otro- Aquí no existen este tipo de cosas…

-Claro que si, en especial en este bosque… dicen que existen vampiros…- Dijo el hombre.

-Vampiros

- Dijo el hombre sin creerlo- Por favor… si quisiera ver un vampiro volvería con mi esposa… esa si es una chupa sangre… y de dinero también…-

-Créeme, también hay espíritus… de niños… dicen que se escuchan sus risas incluso de día…- Dijo el hombre que estaba aterrado, miraba para todos lados con una mirada de pánico.

A Sofía se lo ocurrió otra brillante idea, miro a las ramas vecinas, estas forman un círculo perfecto alrededor de los hombres, el caballo y el maltratado carruaje, Sofía suspiro y trato de imitar las risas de unos niños.

-Escuchaste eso?!- Dijo el hombre aun mas aterrado.

El otro hombre se quedo en silencio, su piel se había puesto de gallina al escuchar esa risita, Sofía no aguantaba su risa, se paso a otra rama y comenzó a reír otra vez, y así sucesivamente dando una vuelta completa al circulo, los dos hombres se fueron corriendo de aquel lugar, maldiciendo y rezando por sus almas, dejando a el caballo y al carruaje en medio del bosque, Sofía bajo del árbol y se acerco lentamente al caballo mientras le hablaba, el caballo que seguía asustado se alejo un poco pero al sentir que la presencia de Sofía no le haría daño dejo de moverse y se quedo quieta, la chica paso su mano por la cara del caballo carariciandolo lentamente para que no se asustara

-Tranquilo hermoso… no te hare daño… te llevare a un lugar mejor… voy a curarte…- luego lo tomo de las sogas del caballo y se lo llevo a su casa, donde lo curo y luego aprendió a montarlo.

Si Sofía recibía criticar por parte de su madre, de su tía y de su hermana, era su forma de calvagar, normalmente las mujeres que cabalgaban a caballo debían hacerlo de costado, pero a Sofía que no le gustaba las formalidades aprendió a andar a caballo como lo hacia los hombres, fue así que calvago a Eloy hasta llegar a la ciudad, dejo a su caballo a la vuelta de la casa de los Mcgilligan, por suerte no había mucha gente a esa hora, bajo de caballo y se acomodo el vestido y el cabello, camino hasta llegar a su destino, dos hombre le abrieron la reja, ella le agradeció a los dos y fue caminando hasta llegar a la puerta, principal, golpeo y espero a hacer atendida, un mayor domo la atendió.

Sofía:- Buenas tardes… Estoy buscando a el señorito…- “Demonios odio decir Señorito…”- William… ¿se encuentra?

Mayordomo:- Si señorita, pase por favor…

Sofía:- Gracias…- Dijo y paso a la lujosa casa, la cual se encontraba muy fresca, Sofía se quedo parada unos segundos en medio de la sala mirando los cuadros que hacia años atrás había visto, dejo de mirar los cuadros cuando escucho unos tones que se acercaban, miro en dirección al sonido y se encontró con la llegada de la señora Mcgilligan a la sala.

Sra. Mcgilligan:- Sofía querida…- Dijo y saludo a la chica con dos besos en la mejilla- Tanto tiempo sin verte-

Sofía:- Buenas tardes Sra. Mcgilligan, como esta?

Sra. Mcgilligan:- Pues yo muy bien feliz de que hallas venido…- La señora antes de decir algo se quedo mirando como una gota de sudor caía por el costado del rostro de Sofía- Linda… tienes algo… en tu… cara…

Sofía se llevo la mano a la cara y sintió la gota de sudor:- Lo lamento, es por el calor…

Sra. Mcgilligan:- Ven querida pasa… William esta vistiéndose, no se que hace este chico a esta hora…

William esa tarde se encontraba en su fresca y desordenada habitación, estaba tirado en la cama cubierto por un simple sabana color blanca, junto a el se encontraba una de las jóvenes mucamas que como siempre era nueva, William siempre que llegaba una nueva mucama la engatusaba y la llevaba a su cama, eso mismo había hecho ese día, ya la venia persiguiendo desde que había llegado, la chica no resistió a sus encantos, sus promesas y versos y cayo rendida de amor, a pesar de las advertencias que le dieron ya todas las muchachas que trabajaban en la enorme casa, la chica de cabello castaño se encontraba acostada junto a William, el no la abrazaba ni nada, simplemente miraba el techo con una mano debajo de la cabeza y la otra sobre su pecho, la chica se acomodo el cabello y apoyo su cabeza en el pecho de William, suspiro y le dijo:

-Estaremos juntos para siempre…-

William al escucharla rio, se separo de ella, y se sentó en la orilla de la cama buscando su ropa, la empleada se sentó y se lo quedo mirando.

Empleada:- ¿Porque te ríes?

William la miro desde un costado mientras se ponía unos pantalones:- No creas que estemos juntos, fue solo por esta tarde lo nuestro y nada mas…

La muchacha se acerco desde atrás y le dijo:- Pero William realmente siento algo muy fuerte por ti…- La chica lo abrazo, pero este le quito los brazos y se puso de pie.

William fue hasta una silla donde tenía una camisa:- No te hagas ilusiones, te lo dije desde el principio “No te enamores de mí…”-

La empleada se tapo con la sabana y fue hasta donde estaba William:- Pero eso a mi no me importa, se que con el tiempo llegaras a amarme…

William rio sarcásticamente:- ¿Qué te hace pensar eso?

A muchacha lo miro y dijo:- Soy una buena chica… seré una excelente esposa… y te daré muchos hijos…

William que estaba de espaldas prendiéndose los botones de la camisa, se dio vuelta, tomo a la chica de los hombros y el dijo:- Mira niña lo que menos quiero ahora es una esposa y muchos menos hijos… no podremos tener nada, jamás lo tendremos… tu eres un empleada y yo tu patrón…- Después de decir eso William fue hacia la puerta.

La chica intento hacer de todo para retenerlo:- Pero yo estoy esperando un hijo tuyo…

William rio otra vez:- ¡Por favor! Eres la cuarta en la semana que me dice lo mismo… será que se pasan los chismes… busca algo mejor…- Dijo y abrió la puerta- Ah… y vístete… y regresa al trabajo…-

La chica no tubo otra opción, busco toda su ropa, se vistió y salió de la habitación, William que no sabia de la llegada se Sofía fue a la cocina a buscar un vaso de agua fresca, en el camino se encontró con el mayordomo que le anuncio la llegada de la chica, le informo que esta se encontraba con su madre en el salón de te, William al escuchar eso sonrió con malicia, tras tomar un vaso de agua se dirigió a la sala de te de su madre.